Imagínese usted que entra en un restaurante de cuya puerta cuelga un enorme cartel que diga: "Coma usted lo que quiera y a la hora que quiera por sólo 19 euros." Es una política comercial como otra cualquiera, y de cierto éxito. Sin ir más lejos, en mi último paso por Barajas ya habían inaugurado un local así, y estaba lleno. Imagínese que, convencido por el anuncio, usted entra y se sienta. Al rato, un cansino camarero de noventa y cinco años comienza a servirle viandas. Éstas llegan ya frías, pero usted tiene hambre y soporta las sucesivas esperas estoicamente. Al cabo de varias horas, y cuando aún no ha llegado a los postres, el camarero se le acerca y le dice: "Por favor, señor, levántese ya de la mesa. Come usted demasiado y hay otros clientes esperando. Se están agotando los recursos, apenas queda butano ni agua para regar las papas, que tardan más en salir. Si quiere comer caliente y sin interrupciones, nuestra empresa pone a su disposición un nuevo local en el que, por sólo 3 veces más, guapas camareras desnudas con patines le darán hasta un chupito con el café." Más o menos lo mismo -más que menos- es lo que está haciendo Terra con sus clientes. En un alarde de cinismo, la empresa fundada por el ex-amigo del ex-presidente que ahora vive en el ex-tranjero ha "amenazado" a 2500 de sus abonados de "Tarifa Plana" porque "se conectan demasiado". La mítica compañía -¿ustedes se acuerdan de "Infovía" y sus cortes, y del pago por llamada?- sostiene que la tarifa plana no es un servicio de conexión permanente, aunque sea de 24 horas. Que me lo expliquen. Si se corta, nunca podrá ser de 24 horas, a no ser que vivamos en Venus donde una hora dura 15 días. Lo más curioso de las misivas de Terra a sus clientes abusones e insolidarios es el toque ecológico: "Se trata de promover una utilización más racional de recursos, al igual que se hace en el caso del agua cerrando los grifos o con la electricidad al apagar la luz cuando se abandona una habitación." Toma castaña, lo bien que va España. ¿Qué tiene que ver que no inviertan en servidores con el trasvase del Ebro? La Federación de Consumidores en Acción (FACUA) ha denunciado esta tropelía, en la que adivina un claro propósito de Terra por "fomentar" la contratación de ADSL. Hace sólo unos días, el Tribunal para la Defensa de la Competencia impuso a Telefónica una multa histórica de 75 millones de euros por abuso de su situación privilegiada en el ámbito de la telefonía fija. No escarmientan ni así.
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El Día de Tenerife, sábado 17 de Abril de 2004